UNA HERRAMIENTA PARA LA ARMONÍA Y LA PAZ INTERIOR
Sonsoles Guinea
La llamada geometría sagrada se refiere a un conjunto de figuras geométricas que aparecen con frecuencia en la naturaleza y son representadas en los templos y lugares sagrados de diferentes culturas desde el inicio de los tiempos. Contienen en sí información de la vida, codificada en proporciones matemáticas armónicas y exactas. Actúan como códigos que nos equilibran y ordenan al contemplarlos y meditar con ellos. Emiten ondas de forma con informaciones precisas según el arquetipo del que se trate, y que irradian y penetran el espacio en el que se encuentran.
Aunque nuestra mente no sepa comprender del todo ese lenguaje de forma y color, nuestro alma si lo hace, y recibe de esta forma la armonización y el orden que la figura en si emana.
Así, además de ser un elemento decorativo de gran belleza, poner una geometría sagrada en un espacio concreto de tu hogar, ayuda a mantener el espacio energéticamente limpio y en equilibrio.
Representa la conciencia de unidad, la matriz desde donde todo nace y a
donde todo vuelve. La fuerza de la vida que se multiplica y el ciclo vital
circular de transformación continua. En tres dimensiones, la división celular se
produce de esta forma.
Es un patrón de perfección del orden cósmico, el arquetipo de la creación,
por lo que irradia armonía, equilibrio y conexión. Une lo que está escindido y
recuerda el patrón original de todo lo creado.
Situada en un espacio ayuda a neutralizar negatividad ya que crea un
campo de luz y perfección.
Es el origen del patrón geométrico de toda vida. Insertada en una estrella de seis puntas,
une las fuerzas masculinas (las líneas rectas) y las femeninas (lo curvilíneo). Formada por siete circunferencias que representan los siete días de la creación. Todo lo existente se genera a partir de esta forma que todo lo contiene. Es la fase inicial de la flor de la vida y es un símbolo de fertilidad y bendición. Al contener en sí la información de toda vida en potencia, ayuda a todo acto creativo, de nacimiento de lo nuevo, el paso de la idea a la manifestación. Proporciona la fuerza del inicio a los proyectos, da el impulso de vida y crecimiento en las fases iniciales según el orden cósmico de toda vida.
Formado por diez espirales girando en sentido contrario (cinco y cinco) representa el movimiento de la energía hacia el interior y hacia la periferia desde un punto central.
Su base matemática es la secuencia de Fibonacci, la divina proporción áurea .
Vista desde un ángulo superior es la molécula dodecaédrica del ADN.
Es una figura que se relaciona con el planeta Venus y por lo tanto con
la energía femenina. Es una representación geométrica de la rosa, planta femenina por excelencia, asociada con todo lo sagrado.
Irradia y expande equilibrio, belleza, fuerza y sutileza
Figura de gran belleza y armonía que representa la trayectoria real
que realiza el planeta Venus en su movimiento alrededor del Sol.
Se forma una flor de cinco pétalos que va creciendo regularmente
con espirales que se cruzan como sucede en la Pentaflor. Por su
relación con Venus, está vinculada también con la energía femenina,
teniendo cualidades muy similares a la Pentaflor.
Movimiento y poder de creación del femenino sagrado.
Esta figura sagrada, formada por dos circunferencias iguales entrelazadas de manera perfecta, contiene en si multitud de significados sobre la vida y el espíritu, como la primera división exacta de la unidad, la unión de lo masculino y femenino, y la forma sagrada de la mandorla. Todas ellas apoyadas en proporciones matemáticas exactas. Yo he elegido representarla como la tapa del pozo del Chalice Well en Glastonbury, porque para mi su simbología más importante es la del poder de la feminidad sagrada, el útero cósmico que gesta toda vida. Y la unión en equilibrio de las fuerzas celestes y las de la tierra. Irradia vida y belleza y ayuda a manifestar la unión sagrada entre lo masculino y femenino, el cielo y la tierra.
El toroide representa un movimiento de la energía que sucede en muchos niveles de la vida en el universo, que parte de un centro y vuelve a él de manera regular y perfecta. Es un movimiento expansivo
y constante alrededor de un punto o un eje central. Representa la armonía y los ciclos regulares de la energía universal.
Representa el movimiento y fluir constante y en equilibrio.
Ayuda, por lo tanto a poner en movimiento las energías estancadas de una manera equilibrada y conectada siempre con su fuente de origen.
Apoya la expansión hacia fuera sin perderse en lo externo, sino siempre en orden y con la referencia constante del propio centro.
Figura geométrica compleja empieza con un círculo central, rodeado de seis más del mismo tamaño, formando una flor. Y a su vez cada uno de estos seis tiene otro en su extensión. En total tiene 13 círculos iguales que están conectados con líneas rectas, expresando la íntima unión entre lo masculino y lo femenino. Está compuesto por los Cinco Sólidos Platónicos.
Es un símbolo poderoso que representa el viaje de la energía a través del espacio y el equilibrio de fuerzas dentro del universo.
Ayuda a movilizar, transformar, purificar y potenciar la energía, siempre hacia el lado del orden cósmico perfecto.
Símbolo espiritual hindú. Herramienta sagrada para oración y meditación. Representa el ciclo de energía e interconexión en el universo. Formada por triángulos superpuestos en direcciones opuestas como símbolo de unión del cielo y de la tierra, así como de la parte masculina y femenina de la divinidad. Ayuda al equilibrio de centros energéticos y al alineamiento con la energía cósmica del universo para la manifestación del espíritu en la materia.
Es la expresión visual del mantra OM. Su contemplación propicia la conexión con el yo superior. En meditación proporciona calma y centramiento.
Tiene su origen en la cultura celta, siendo utilizado como amuleto de protección. Se dice que las brujas entrelazaban cordeles para formar este símbolo protector. Es un símbolo sencillo pero muy bello y poderoso que actúa como repelente de adversidades y energías negativas devolviéndolas a su origen. Las cuatro lazadas representan las fuerzas de la naturaleza (4 elementos) de las que se servían las mujeres de poder para realizar sus alquimias y honraban en sus rituales. Es por lo tanto un símbolo de respeto y honor hacia las fuerzas de la tierra, y también hacia lo divino que todo lo une y que está representado en el centro del nudo.
Si tienes cualquier duda podemos verlo juntos-as para crear esa herramienta personalizada que te permita conexión y armonía tanto en ti como en los espacios y estancias en los que se ubique.
ARO EN SEDA
Pintura en Seda
Aro Redondo 20cm
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SEDA SOBRE BASTIDOR
Pintura en Seda
Bastidor de madera 40×40 cm
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SEDA SOBRE BASTIDOR
Pintura en Seda
Bastidor de madera 80×80 cm
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